Puntos más y puntos menos, lo cierto es que el reciente Festival, dejó varias lecciones para el 2013, que Chilevisión, canal organizador hasta 2014 del certamen, debe necesariamente tener en cuenta si desea ganar una nueva licitación... o si es que no quiere perder la actual.
LA ORGANIZACIÓN
Fue por lejos el aspecto peor evaluado este año. Mi amigo Fabián Reyes, en una columna escrita en este mismo blog, y tomaré textual lo que él afirmó ahí., hace esta descripción:
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"...con todas las irregularidades y cambios que han salido mal, como la orquesta de Carlos Figueroa, la confirmación de “Dinamita Show” a ultima hora, la entrega del contrato a “Bombo Fica” a Ultima Hora también, la actitud ANTIPATRIOTA por parte de los animadores en contra de Daniel Muñoz, la falla de audio IMPERDONABLE Y DESUBICADA en contra de Salvatore Adamo y las EXAGERADAS Y PATUDAS exigencias de Luis Miguel y Morrisey y paramos de contar ahí hasta el momento".
Luis Miguel exigió 120 toallas, biombos negros para que nadie lo viera, un tequila de no sé qué marca, un agua purificada Fiji, vinos que no se encontraban en el país. Y eso que son de las que me acuerdo en este instante, porque fueron varias más. Morrisey hizo muchas exigencias, y varias de última hora, las cuales pueden consultar en la columna en la que analicé la tercera noche.
A eso debemos agregarle los problemas técnicos cuando empezaban la actuación de Rossana, el domingo. Es cierto que no podemos pedir que estos imponderables jamás exista, siempre está la posibilidad de que existan. Pero dos veces en un mismo certamen, es mucho. Y los cortes de luz que hubo en la galería en día final, durante la actuación de Bombo Fica, no merecen mayores comentarios.
Y mejor ni hablar de las desmedidas exigencias de ciertos artistas, como Luis Miguel o Morrisey, las cuales ya todos conocemos (lo de Morrisey está en la columna referida a la tercera noche). Pero el colmo de los colmos este año fue lo sucedido con las restricciones a la prensa acreditada la primera noche del certamen. Chilevisión sostuvo que las medidas fueron asumidas por una restricción impuesta en una de las cláusulas del contrato con Luis Miguel, por lo que los profesionales debieron conformarse con ver el espectáculo a través de una pantalla instalada en el área de prensa. Luis Miguel permitía sólo 120 periodistas durante su actuación, y los medios acreditados eran más de 700. Es cierto que durante el Festival ningún canal puede hacer desde el anfiteatro de la Quinta Vergara enlaces en vivo y mostrar imágenes en vivo del show (eso vulneraría los derechos de exhibición del canal que ha ganado y pagado por la licitación)... pero limitar la información, no es lo más correcto ni democrático. Al día siguiente se logró un acuerdo en el cual regirían las limitaciones acostumbradas para la cita, donde se limita la grabación directa del show, sólo remitiendo el trabajo a “notas testimoniales”. Como dato, la actuación de Luis Miguel no pudo ser vista por A&E ni por la señal on line del otrora canal de la Universidad de Chile, ya que por contrato, las imágenes eran sólo para ser emitidas en Chile.
LOS ANIMADORES
Fue otro gran flanco de críticas. Desde lo que sucedió con Diego Torres el miércoles, donde el artista, por la forma en que Eva Gómez lo despidió ("Ya viene lo más esperado de la noche, Luis Miguel"), lo irritó de tal manera que no concurrió a la conferencia de prensa. Y el jueves, con Camila, fue lo mismo, donde Rafael Araneda los despidió anunciando, en la cara del grupo, a "lo más esperado de la noche... Dinamita Show". Los integrantes del grupo mexicano sólo atinaron a sonreír y a llevarse sus trofeos. Por dignidad al artista, Eva y Rafa, eso no se hace. Se puede decir: "Ya tenemos más Festival", o "Queda más noche aun". Pero jamás delante de un artista, anunciar a otros artistas.
Y qué decir que les falta experiencia en salir del paso ante imprevistos. Por ejemplo, lo que sucedió el domingo con Rossana, donde la artista, debió contar un chiste para poder salir del paso. Y los animadores, ¿qué papel cumplieron? Presenciar lo que la artista hacía, supliendo el papel que ellos deben asumir. Por ese lado, flaquearon bastante. Y además, se dice que había roces entre ellos, pero eso fue dicho al voleo y no hay nada concreto en eso.
Y lo otro que se observó en los animadores... fue el acelerar la entrega de premios en algunos casos, y despedir a algunos muy rápidamente, como pasó la tercera noche con Daniel Muñoz y su grupo 3x7 Veintiuna, donde se les dio la Antorcha de Plata... y fueron bajados del escenario, cuando el Monstruo pedía más premios para ellos. Hasta Ítalo Passalacqua dijo que se merecían más.
LOS RATINGS
Como nunca, los ratings tambalearon este año. La primera noche, fue derrotada a ratos por el reality Mundos Opuestos de Canal 13. Y la noche del sábado, a ratos sucumbió ante el Festival Viva Dichato, que era emitido por Mega. Claramente es muy difícil obtener 50 ó 60 puntos de rating hoy. Pero Viña hace rato que no perdía en sintonía.
EL HUMOR
Uno de los puntos más criticados el año pasado(especialmente por el uso de garabatos y burlas a las minorías sexuales) fue uno de los puntos rescatables este año. Dinamita Show y Bombo Fica, impecables y que dieron las mayores sintonías al certamen. Zip Zup, en búsqueda de un estilo propio, no defraudo. Pero me quiero detener en algo:
Al menos, cuatro grupos en Facebook querían a Bastián Paz (el humorista salido de "Coliseo Romano") en el certamen viñamarino. Haber llevado a Bastián Paz a la Quinta Vergara este año habría sido un despropósito de marca mayor. Una, es muy nuevo en las lides de hacer reír, por ende, le falta mucho camino a recorrer. Aparte del contrato de exclusividad con Mega, se sabe que sus rutinas son subidas de tono a veces... y Chilevisión no quiere tener más problemas de los que tuvo en 2011, que le significaron multas del Consejo Nacional de Televisión.
LOS TIEMPOS DE ACTUACIÓN
Otro de los puntos que hace años venía cuestionándose en el certamen era por los largos tiempos de actuación, al menos este año, y en varios casos, gracias a las bajadas forzadas de parte de los animadores en algunos casos, los tiempos en general se cumplieron. Claro, Rossana y José Luis Perales se alargaron, pero en un rango previsible. Morrisey quizá el único mérito que tuvo es que fue puntual en su tiempo de actuación.
Raya para la suma, el Festival debe mejorar muchos aspectos, sobre todo los aspectos organizativos, que quedaron en deuda este año. Y los animadores, o mejoran del cielo a la tierra, o los cambian. Quedan muchas tareas para la casa, y eso lo comprobaremos, tentativamente, entre el 20 y el 25 de febrero de 2013, cuando sea el Festival número 54.
...por letra y puño de Miguel
@MiguelGutirrez2
Ojo, que se anunció que la Municipalidad de Viña del Mar iba a cursar sanciones a CHV por irregularidades con los periodistas y con la transmisión, que podría ser hasta el cierre anticipado del contrato con el canal
ResponderEliminarAsí es, Roberto. Y además, la baja sintonía del Festival de Viña 2012 también se debió a problemas de audio (con Rosana a su lado en pleno escenario), nula organización, falta de compromiso con la competencia folklórica, mala programación de los artistas, y programas satélite que se dedicaron a hablar estupideces en vez de hablar de los artistas, además de una poco atractiva parrilla, que hicieron que perdieran el liderazgo que siempre tuvieran.
EliminarExcelente el extracto de mi columna!! La verdad, a mi todo lo ocurrido este año en Viña, me dió nauseas.
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